Elon Musk se compra una ciudad en mitad de Texas y lanza un aviso a los habitantes: “Podrían perder el derecho a seguir”
La recién aprobada ciudad de Starbase busca acelerar el desarrollo urbanístico.
La ciudad de Texas que la empresa Space X de Elon Musk alberga busca desarrollar un modelo de zonificación en la región y que según ha notificado la empresa aeroespacial, que tiene la ciudad en derecho, los residentes podrían perder el a sus propiedades. “La ciudad de Starbase está llevando a cabo una audiencia que determinará si puede perder el derecho a continuar usando su propiedad para su uso actual, lea este aviso con atención”, dijo el recién contratado de la ciudad, Kent Myers.
La ciudad de Starbase
Starbase sirve como sede de Space X y base de lanzamiento de su programa Starship, cuyo objetivo final es transportar pasajeros en vuelos a la Luna y Marte. En este sentido, a principios de este mes unos 200 residentes de los 283 de la zona con derecho a voto, en su mayoría empleados de Space X, aprobaron una propuesta para convertir el terreno de Texas en una ciudad al mando de Starbase. La ciudad tiene un total de 500 residentes, sin embargo más de la mitad son empleados de Space X, incluso el alcalde, por lo que la propuesta salió a flote.
La idea de Starbase es desarrollar un espacio que combine usos residenciales, de oficinas, comerciales y de servicios a pequeña escala. Los residentes recibieron un memorando con todas las planificaciones de zonificación. “Nuestro objetivo es garantizar que el plan de zonificación refleje la visión de la ciudad de un crecimiento equilibrado, protegiendo los impulsores económicos críticos, garantizando la seguridad pública y preservando los espacios verdes”, decía el memorando. En los último años, Elon Musk ya ha llevado a cabo esta práctica varias veces, quién traslada las operaciones de sus empresas a localidades aisladas con bajo costo y pocos impuestos.
Lanzamientos accidentados
A raíz de estos acuerdos urbanísticos, las planificaciones de Space X van aumentando. A principios de esta semana, la istración Federal de Aviación (FAA) aprobó la solicitud de SpaceX de aumentar sus lanzamientos anuales de cinco a 25. Ahora bien, aunque sea la empresa de Elon Musk, no significa que todos los lanzamientos salgan bien. El pasado martes se produjo un lanzamiento accidentado cuando un cohete de 123 metros perdió el control antes de estrellarse en el océano Índico.
Todos los lanzamientos de Space X se realizan en la playa de Boca Chica, lanzamientos que el Senado de Texas ha autorizado. El senador estatal republicano Adam Hinojosa presentó un proyecto de ley independiente que permitiría a Starbase cerrar la playa entre semana y las autoridades del condado de Cameron tendrían la autoridad para establecer el horario de la playa los fines de semana. Todo este sistema que está implantando Space X no ha sentado bien en algunos lugareños que ya expanden sus primera críticas alno poder usar libremente la playa.
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