José Antonio Camacho: “Ya no voy a entrenar más, lo dejo”
Su personalidad arrolladora, su temperamento y su volcánico carácter forjaron, primero, un gran defensa y luego un formidable técnico que llegó a seleccionador.
Resultaría temerario discutir la distinción virtual de José Antonio Camacho (Cieza, Murcia, 1955) como icono nacional. Leyenda madridista, con 16 temporadas y 577 partidos de blanco, 81 veces internacional y seleccionador español durante cuatro años, su aventura como entrenador comenzó en Vallecas. Ruiz Mateos lo fichó a mediados de la temporada 91-92, logró ascender al Rayo a Primera División y en la siguiente campaña moldeó un equipo tan solvente que ni Real Madrid ni Atleti ni Barça lograron asaltar el fortín del barrio que defiende la franja roja. A unos meses de entrar en la séptima década de vida, su personalidad arrolladora y el volcán de su pasión futbolera siguen intactos.
—¿Se mantiene tan activo como siempre?
—No paro. Entre los veteranos del Real Madrid, la AFE y los equipos de leyendas estoy siempre de viaje.
—¿Le llegan ofertas para entrenar?
—Sí, pero ya no voy a entrenar más. Lo dejo. Voy a cumplir 70 años y ya no estoy para meterme en esos líos. Estoy fuera de la circulación para los banquillos. El Murcia quiere que esté con ellos de asesor, pero no tengo tiempo para estar allí el tiempo que necesitan.
—¿Qué le pareció el derbi de Champions?
—El Madrid ganó merecidamente. Pudo incluso meter un tercer gol. En este tipo de partidos lo esencial es marcar y ganar.
—¿Qué espera en el Metropolitano?
—El Atleti no saldrá en tromba. Irá a por el partido con tranquilidad y tendrá precauciones para no descubrirse atrás más de lo necesario. Impondrá su solidez en el centro del campo, pero no hará locuras porque sabe que el Madrid le puede hacer un gol en cualquier descuido.
—¿El Madrid es muy distinto cuando presionan los atacantes?
—No es fácil pedir a los de arriba que presionen continuamente porque son los que tienen que resolver los partidos. Tal vez otros tienen que defender más.
—¿Rodrygo está a la altura de Vinicius y Mbappé?
—Es un jugador fantástico y está en un gran momento. Ancelotti le da confianza y él está respondiendo. Claro que está a su nivel cuando está como ahora, pero el fútbol son momentos y estados de forma.
—Usted es más madridista que el escudo, pero empezó como técnico en el Rayo…
—Yo tenía un contrato vitalicio con el Madrid y empecé allí entrenando con los juveniles. Cuando surgió la oferta del Rayo ni me lo pensé. Quería probarme. Entonces era un equipo ascensor que estaba entre Primera y Segunda. Fui para allá y salió bien.
“Tenía un contrato vitalicio con el Madrid y empecé allí entrenando con los juveniles. Cuando surgió la oferta del Rayo ni me lo pensé”
José Antonio Camacho, exjugador y exentrenador del Real Madrid y Rayo
—Ascendió y en Primera pusieron al Madrid contra las cuerdas…
—Se nos dio bien ese año. Ganamos en Vallecas y empatamos en el Bernabéu. No pudieron ganarnos. Para mí fue una sensación extraña tener al Madrid como rival, pero estábamos muy motivados. Ganamos 2-0 en casa y empatamos a uno en el Bernabéu.
—El Atleti de Schuster y Futre también cayó por 2-0…
—Éramos fuertes en casa. Algunos rivales pensaban que ir a Vallecas suponía ganar fácil por ser un recién ascendido y era todo lo contrario. Jugábamos muy mentalizados, como un equipo muy solidario, apretábamos mucho y las dimensiones del campo nos ayudaban.
“¿Mi Rayo? Éramos fuertes en casa y jugábamos muy mentalizados”
José Antonio Camacho, exjugador y exentrenador del Real Madrid y Rayo
—Contra el Barça empataron y se cabreó mucho…
—Sí, porque íbamos ganando 3-1, ellos estaban con uno menos y nos empataron en el descuento. Ruiz Mateos bajó al vestuario diciendo que el viaje que prometió si ganábamos se mantenía y yo dije que no. Me enfadé con la actitud de los jugadores porque vi conformismo con un empate después de tener el partido ganado y no podía aceptarlo ni ante el Barça de Cruyff. No era de recibo estar contentos por algo así. Rechacé el regalo del presidente.
—¿Qué relación tenía con Ruiz Mateos?
—Era un hombre muy peculiar, pero conmigo era muy sensato y se portó bien. Le explicaba las cosas, las entendía y hacía caso.
—¿Cómo ve al Rayo actual?
—Muy bien. Están demostrando que sin un presupuesto estratosférico, con criterio y una buena línea de trabajo se pueden conseguir grandes resultados. Trabajan muchísimo en el campo y sin grandes nombres plantan cara a cualquiera. Es un ejemplo de cómo se deben hacer las cosas bien.
—Saben elegir bien a los entrenadores...
—Sí. Tanto Míchel como Iraola y ahora Iñigo le dan un plus muy importante al equipo. Saben transmitir su idea a los jugadores y ellos salen convencidos de que pueden estar a la altura de los más grandes, aunque se llamen Rayo Vallecano.
—Además, tienen a un murciano de Cieza que se apellida Camacho ¿Isi es el líder?
—El líder es el entrenador. Isi está muy bien, tiene calidad, trabaja mucho y es competitivo. Tiene la confianza del técnico y de sus compañeros. Además, es una gran persona. Jugadores como él y otros hacen que el Rayo no esté peleando en la zona baja y estén realizando una temporada magnífica.
—¿Puede dar otro zarpazo en el Bernabéu?
—Será difícil. El Madrid está necesitado y lo lógico es que gane, pero harían bien en revisar como referencia el partido que hizo el Rayo en Barcelona. Lo plantearon de lujo, fueron valientes y no merecieron perder en absoluto. El Rayo no va a regalar nada por muchas bajas que tenga, será alegre e irá a por todas. Si el Madrid no sale mentalizado le va a dar un disgusto.
—¿Ve más calmado a Vinicius?
—Yo también tenía un temperamento fuerte. Lo que tienen que hacer los árbitros es dedicarse a lo suyo, que es pitar, y punto. Tenemos que estar contentos por tener a Vinicius en la liga española y disfrutar con lo que hace en cada partido. Tiene una personalidad y se puede moldear un poco, pero no cambiar. Los árbitros tienen que pitar sin mirar cómo se llama un jugador determinado.
“Yo también tenía un temperamento fuerte. Lo que tienen que hacer los árbitros es dedicarse a lo suyo, que es pitar, y punto”.
José Antonio Camacho, exjugador y exentrenador del Real Madrid y Rayo
—Se fue del Madrid dos veces. ¿Nunca se ha arrepentido?
—Hice lo que debía en cada momento. En el 98, con Lorenzo Sanz, ni llegué a debutar por un problema de respeto con mis ayudantes. En 2004 dije a Florentino que tenía que fichar sólo a jugadores top, como los que hay ahora, pero la plantilla que había no estaba capacitada, en mi opinión, para conseguir lo que ellos esperaban y lo dejé.
—¿Cómo quedó su relación con Florentino?
—Bien. El trato es muy cordial siempre que coincido con él. Ahora soy también vicepresidente de los veteranos del Real Madrid y nos llevamos bien. Además, no se puede gestionar mejor de lo que está haciendo él. El Bernabéu y la Ciudad Deportiva son un espectáculo, el equipo es buenísimo y el club es el mejor del mundo.
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