El Acero, como el Athletic, desempolva La Gabarra
El club bibaíno de Olabeaga surca la ría por sexta vez en su historia al ascender a Primera Regional. Lo inauguró en 1924. Recorrido desde el barrio hasta el Ayuntamiento.


El Acero, el equipo representativo del barrio bilbaíno de Olabeaga, conocido como Noruega, fundado en 1919 por trabajadores de los astilleros Euskalduna, celebró su campeonato nacional de la Serie B en 1924 remontando la ría del Nervión a lomos de su particular Gabarra como pionero de utilizar la embarcación para festejar sus hito deportivo. Este sábado repitió la maniobra entre dos de los enclaves más significativos de la capital vizcaína.
Si hace apenas un año y dos meses el Athletic de Ernesto Valverde fue arropado por la consecución de la Copa del Rey de 2024 por más de un millón de hinchas, este sábado el también centenario Acero desempolvó la barcaza para desatar la euforia por su ascenso a la Primera Regional. Lógicamente, sin tantos focos ni aralacas. Es lo que tiene el fútbol modesto respecto a la repercusión mediática de la élite. Se trata, además, de su sexta vez en estas lides en los últimos cuarenta años. Fue en la década de los 80, coincidiendo con el Athletic levantando Ligas y Copas de manera brillante, cuando a un directivo rojiblanco se le ocurrió proponer emular las celebraciones del Acero para sobredimensionar esta iniciativa con los leones y recorrer los 16 kilómetros de ría desde Getxo hasta el Ayuntamiento de Bilbao enseñando los trofeos a su amplia parroquia.
La Gabarra del Acero, o más bien un barco de Bilboats, no partió desde el Puente Colgante, sino desde la mítica grúa Carola, a la altura del Museo Marítimo, debajo del Puente Euskalduna. La primera plantilla, encabezada por su entrenador, Xabi Burgueña, ex centrocampista del Bilbao Athletic, que llegase a disputar una pretemporada con Jupp Heynches, y la voluntariosa directiva del Acero se subieron a bordo hasta el puente del Ayuntamiento para girar y seguir disfrutando del jolgorio en el populoso barrio de Olabeaga, frente a la península de Zorrozaurre. Antes, la hoja de ruta indicaba el permitente Kalejira, poteo y una comida popular, con entrega de trofeos amenizada con música, con la colaboración de exjugadores y de las plantillas que consiguieron los últimos ascensos. Un Acero que por fin, tras cuatro años jugando alguna promoción, consumaba el ansiado y merecido ascenso.
Rellene su nombre y apellidos para comentar
Tu opinión se publicará con nombres y apellidos