Griezmann-Koke, una pareja que sigue el espíritu del Cholo
Cambio de rol para el francés y el capitán, dos de los jugadores vitales para Simeone, la próxima temporada. Solo Julián y Oblak jugaron más que ‘Grizi’.

El lunes pasado amaneció con eso que AS ya había contado en abril: que Griezmann y Koke seguirán la temporada que viene en el Atlético. El primero dando la espalda, esta temporada que viene al menos, a la llamada de la Major League Soccer (MLS) y América, cultura de la que es un declarado fan. El segundo, ampliando un año más su leyenda: la temporada 25-26 será su séptima como capitán, superando las seis del Capi, de Gabi, hasta ahora el segundo que más veces portó el brazalete de capitán por detrás de Collar, que lo hizo diez, el que más.
Con 681 partidos, Koke es el futbolista que más veces ha vestido la rojiblanca, dejando muy atrás ya los 553 de Adelardo que durante 46 años fue un techo inalcanzable para los demás. El lunes el club anunció la renovación de los dos un año más. Hasta 2027 y 2026 respectivamente. A sus 34 y 33 años. Ambos han sido dos futbolistas capitales en la etapa de Simeone en el Atlético. En minutos e influencia. Pero esta renovación lleva asociado un asterismo: sus roles serán otros.
En la 24-25 ya han asomado. Y eso que Griezmann fue el segundo jugador de campo en minutos del Atlético, con 3.550, adelantado en 155 por Julián Alvarez (3.705) pero con una particularidad: la semana negra del Atlético en marzo, la de las derrotas ante el Madrid en la Champions (el maldito penalti de Julián en la tanda) y el Barcelona en Liga le llevaron al banquillo. Cambiaron para siempre lo que Griezmann ha sido y es en el Atleti. De indiscutible a suplente de lujo.
Y es que el Griezmann de la capa, ese que se echaba al equipo y los partidos importantes a la espalda para llevar al equipo a la victoria, no apareció en ninguno de los dos. Al contrario. El suyo fue un juego fatigado, sin regates, sin disparos, con balones hacia atrás. A tres goles de los 200 con la rojiblanca desde febrero, de hecho, ahí se quedó. Y desde el partido siguiente comenzó a enlazar suplencias, pero ahora sin cláusula que lo provocara (aquella de la segunda temporada de su cesión por el Barcelona, la 22-23, que, para no sumar partidos que obligaran al Atleti por contrato a comprarle jugaba desde el minuto 60’, que así no contaban). 25 minutos ante Las Palmas, 29 ante el Rayo Vallecano, 22 ante la Real Sociedad, 27 ante Osasuna y 20 ante el Betis. Hasta el final de temporada solo volvió a ser titular dos veces, ante el Alavés 59 minutos y ante el Girona 62, la última jornada. Su ampliación de contrato ya avanza que ese será su rol esta temporada: su sueldo, de ocho millones en un año, dividido en cuatro por dos. Menos minutos que aseguren su calidad.
Koke esta temporada ha sido el undécimo jugador de campo en minutos del Cholo (2.658) algo atípico. Y, aunque también estuvo fuera del equipo ocho partidos por una lesión muscular, la cifra es la foto de que va dejando su sitio. Ese Koke que también comenzó la temporada en el once pero a partir de noviembre empezó a alternar banquillo con titularidades de manera continua. Un Koke que es más que un capitán, es pilar, el único futbolista que queda de aquellos primeros sobre los que se levantó el equipo y el club, los Gabi, Godín, Raúl García, Juanfran, Tiago..., y que en la 23-24 fue el cuarto jugador de campo con más presencia, el tercero en la 22-23, el primero en la 21-22, la 20-21, segundo en la 19-20... Y así siempre. Sus papeles cambian, sus colores no, porque nadie como Simeone sabe que los, íntimos amigos, siempre juntos, son el mejor ejemplo de su método y espíritu. Y que un poco de ellos siempre es mucho.
Dos capitanes, capitales... que quieren el Mundial
Los dos son capitanes. Koke, el primero desde que Godín se fue al Inter en la 19-20. Grizi volvió a entrar en ese grupo del que ya formaba parte antes de irse al Barça en 2019 cuando la temporada pasada, la 23-24, Savic se fue. El de volver a tener el honor de prenderse la C de capitán al brazo. Ambos, en declaraciones a los medios del club tras anunciarse su renovación, se mostraron “orgullosos y felices”. Y con un objetivo claro por delante: el Mundial de Clubes. Esta competición en la que solo habrá dos representantes españoles y son el Madrid y el Atleti y no el Madrid y el Barça. Koke lo tiene claro. “Me gustaría que fuera el noveno título de mi palmarés”, dijo. “Este Mundial será algo especial y queremos hacer historia”, apunto Grizi, ese que siempre suma. No en vano, Julián lo contó en AS: el primero que le ó para fichar por el Atleti fue el francés. Ídolo con el rojiblanco en vena.
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