Pulido: “El objetivo del Lega es ascender, pero no siento presión”
El primer fichaje del Leganés tras el descenso a Segunda y de la era Andrés Pardo habla de “hambre” y “ambición” para definirse. ite que Diego García le habló “maravillas” del club.
Rubén Pulido tiene 24 años y el desparpajo de un chaval de barrio de toda la vida. Se le nota en el tono de sus palabras y no tanto en la cantidad escogida para dar sus respuestas. Aun así, este defensa central, primer fichaje del Leganés (firma por tres temporadas) tras su descenso a Segunda (y primer fichaje de la era Andrés Pardo) transmite frescura. Normalidad. Calle. La misma con la que ite que el objetivo del equipo es volver a la élite… pero que no hay presión ni responsabilidad por conseguirlo. “Se irá viendo”, ha dicho durante su puesta de largo.
“No siento responsabilidad. El objetivo es ascender, pero no siento esa presión por el ascenso. Eso se demuestra en el día a día. Se irá viendo. Hay un buen proyecto y hay hambre. Hay ganas de volver a Primera”, ha comentado durante una comparecencia corta, sin tiempo para dejar grandes titulares, pero con suficiente margen para dejar claro que el proyecto pepinero le encanta.
“Desde el primer momento Andrés [Pardo] me transmitió mucho interés y confianza. Creo que es un sitio donde puedo seguir progresando y aportar mi calidad futbolística para el crecimiento del club”, ha comentado en una reflexión (lo de proyecto interesante, lo de lugar idóneo) que ha repetido en varias ocasiones.
No importa que no haya entrenador
A sí mismo se define, primero, como central, aunque también pueda jugar de lateral. “Mi posición natural es defensa central. Luego te tienes que adaptar a lo que el míster y el equipo te diga. Puedo sumar en todas partes (…) Han pasado tres años desde que salí de Fuenlabrada y de Madrid. Soy un jugador más maduro. He evolucionado bastante en estos años”, ha comentado.
Además, insiste en que sí algo aportará será ambición. “Puedo aportar mucha hambre, por mejorar y seguir progresando en mi carrera. He hablado con Diego García y me ha hablado maravillas del club. Él está encantado. Aquí las cosas se están haciendo muy bien”, ha vuelto a decir.
Diego García, compañero de fatigas en las inferiores del Real Madrid y parte de la misma agencia de representación, ha sido su cicerone en un Leganés que todavía no tiene entrenador. Pero a Rubén no le importa porque dice que, llegue el que llegue, al final la dinámica con todos es parecido. “No ha influido en mi decisión que no haya entrenador aún. No tuve mucho que pensar. Rápidamente nos pusimos de acuerdo. ¿Qué no haya entrenador? El puesto te lo tienes que ganar en el día a día”, ha zanjado.
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