Bada Huesca da la primera sorpresa de la Copa
El equipo oscense, que se salvó del descenso en la última jornada, elimina al Logroño, el mejor equipo de la segunda vuelta.
La Copa del Rey tiene estas cosas, que iguala a los equipos, y se producen habitualmente sorpresas. Hoy, en el primer partido: el Bada Huesca, que ha estado peleando por salvarse toda la segunda vuelta, que era el último en diciembre (seis puntos), que logró su objetivo en la última jornada, ha mandado a casa al Logroño, quinto de la tabla, que en la segunda vuelta había conseguido 26 puntos, el que más, uno más que el Barça: 25-28 (11-14).
El partido se explica porque el Logroño jugaba pensando en el sábado, en ser competitivo con el campeón, el Barça, y planteó el encuentro con muchas rotaciones, y demasiados cambios. Eso, si no lo haces de manera habitual, en ocasiones perjudica. Y la prueba está que con un siete inicial con Modi de lateral con Pergel y El Korchi en el banquillo, pues le iba bien: 7-4. De repente, los relevos. Y todo se fue a pique, con los que los oscenses se fueron al descanso con tres goles de renta gracias a la labor de Parera en el pivote, Carlos Pérez, y Óscar García, sobre todo.
No hubo forma de cambiar el rumbo del encuentro por más que Ledo echase un cable en la portería. El Bada se escapó con una diferencia de seis goles. Entonces llegó un tiempo de Velasco para preguntarles a sus jugadores si les parecía bonito a lo que estaban haciendo.
Cambió la actitud del Logroño, pero todo estaba mal para él: falló los últimos cuatro penaltis (Cadarso, Pergel y Preciado), por ejemplo, y sufrió la descalificación de Pergel por balonazo en la cabeza al portero, aunque en las sucesivas repeticiones se observa como es el meta quien cambia la posición.
En el minuto 57 (24-26) aún había luz para el Logroño gracias a tres goles rápidos seguidos de Ponciano. Pero el Huesca, el mejor de los modestos en la segunda vuelta, supo cómo especular con su renta para vencer 25-28.