El (pen)último baile es un rock: a por la segunda Champions
López Pinedo, Fernández, Perrone y Munárriz, campeones de Europa con el Barceloneta en 2014, abanderan el “cambio de estatus” de los marineros, en busca de su segunda Champions, en la despedida de ‘O Rei’ Felipe.
Finta como si estuviera dentro del agua Felipe Perrone las preguntas directas sobre la fecha exacta de su retirada. Pero es un secreto a voces, sobre todo después de los homenajes recibidos en la final de la Liga tanto en la Sant Sebastià como en Can Llong, que el final se acerca. Y que puede rubricar a lo grande una carrera de leyenda. Con una Champions que el Club Natació Atlètic Barceloneta persigue en Gzira (Malta), en una final a cuatro que arranca este viernes. Y que sería la segunda en la historia de los marineros.
De aquella en 2014 en las piscinas Picornell ante el Radnicki serbio, eterno rival de un Novi Beograd que será ahora el escollo en la semifinal (19:00, Teledeporte), tan solo siguen en la plantilla el propio Perrone -que conquistó otras dos, con Pro Recco y Jug Dubrovnik- y Alberto Munárriz. También Fran Fernández continúa en el equipo, como ayudante de Elvis Fatovic, y Dani López Pinedo en el club, como responsable del área de Personas y Valores. Los cuatro, como incombustibles rockeros deseosos de entonar de nuevo el “We are the Champions”, coinciden, reunidos con AS, en el diagnóstico sobre el Barceloneta en este tránsito de 11 años.
“Aquella Copa de Europa va a estar clavada en nuestra memoria para siempre, porque hasta hoy ha sido la única. Creo que marca un antes y un después en el club, y nos hizo ser conscientes de que podíamos hacerlo. Ahora tenemos otro estatus, y disponemos de una oportunidad de oro”, analiza Fernández, a lo que López Pinedo añade que “esa Champions fue casi una sorpresa para nosotros, porque no éramos uno de los favoritos, y mira cómo ha cambiado el club, que llegamos a una final a cuatro entre los grandes candidatos. Eso dice mucho sobre lo que se ha ido trabajando”.
Recuerda Munárriz que, en aquel curso 2013-14, él “acababa de llegar, y creo que el club ha evolucionado mucho en cuanto a las expectativas y al lugar que ocupa en el waterpolo europeo. Entonces, el club tenía muchas ganas de crecer, de ir mejorando, se estaba haciendo un nombre, y ahora hace años que el Barceloneta es un fijo, con el que el waterpolo europeo cuenta”.
Coincide con todos ellos Perrone, quien asegura que, 11 años después, de aquel éxito “queda una manera de jugar, que es nuestro estilo, un juego a la contra, rápido, dinámico. Es nuestro sello y lo que nos ha llevado a estar los últimos diez años entre los cinco mejores equipos de Europa”, rubrica.
No en vano, ésta es la octava vez en las 12 últimas ediciones que el Barceloneta se sitúa entre los cuatro mejores de la Champions. Y las ganas son enormes, tras la ausencia en la fase final del año pasado y la derrota hace dos precisamente ante el Novi, en el que militaba un Álvaro Granados que ha vuelto a engrosar las filas de los marineros, quienes se han impuesto en 45 de sus 46 partidos de esta temporada. Sí estuvo en aquellas últimas eliminatorias Marc Larumbe, de nuevo semifinalista ahora pero con el Marsella, que se mide con el vigente campeón, el Ferencvaros de otro viejo conocido: Miguel de Toro (21:30).
Entre ceja y ceja tienen el título en la Barceloneta, “un club muy autocrítico, hasta el punto de que a veces se hace hasta sangre”, confiesa Fernández, quien destaca que “nunca se mira por el retrovisor al que viene detrás, sino a los nuevos horizontes, a cómo seguir mejorando. En ocasiones es enfermizo. Cuando nos reunimos, estamos comiendo, en todo momento… alguien tiene que decir ‘vamos a parar’, porque no es sano”, ite.
“Se ha llevado al límite lo que es la deportividad en el buen sentido, el club lo ha entendido perfectamente y nos ha empujado a todos hacia eso. Y los jugadores son los primeros que llevan a los demás a seguir dando pasitos para continuar entre los mejores del mundo”, conviene López Pinedo. “Es nuestra manera de ser, está en el ADN, es algo que Santi (Fernández) inició con un grupo que fue creciendo, que empezó a ganar y nos hemos metido en una dinámica que, en cuanto se consigue algo, pensamos inmediatamente en lo siguiente”, cierra Fran Fernández.
Quien dirigía al Barceloneta en la Champions de 2014 era, junto a su hermano Chus, el hoy seleccionador español David Martín. En su conversación pendiente con Perrone se encierra la fecha exacta de la retirada del capitán: ¿en esta Champions? ¿Irá acaso a los Mundiales de este verano?
“Todavía no ha dicho que se retira, habrá que verlo, pero que una leyenda como él pudiera culminar con una Champions sería magnífico”, sentencia López Pinedo. Y abunda Munárriz: “Lo que Felipe ha significado para nosotros es brutal, nos ha enseñado muchísimo. El año pasado fue muy duro para él no poder estar en la fase final, era la primera que él se perdía en mucho tiempo, y tener esta revancha es importante. Espero que se despida de la Champions a lo grande”.
Así que tiene la última palabra el propio Perrone: “Esto es tan grande que no es de Felipe ni de nadie: es ganar una Champions para este club, que se lo merece”.
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