Ledecky y Walsh dan la estocada a París 2024 en siete horas que son historia
Las estadounidenses baten en un día más récords del mundo que en todos los Juegos en La Défense. Katie pulveriza el de 800 libre tras 3.186 días. Gretchen rebaja el 100 mariposa dos veces.


Hicieron historia Katie Ledecky y Gretchen Walsh esta madrugada del sábado al domingo, en la jornada final de las Pro Swim Series de Fort Lauderdale. Una, por convertirse en la nadadora que más ha aguantado en el tiempo para batir su propio récord del mundo, en este caso en los 800 metros libre. La otra, por rebajarlo dos veces el mismo día y, sobre todo, por ser la primera mujer de siempre en bajar de los 55 segundos en los 100 metros mariposa. Y ambas, por dar el golpe de gracia a La Défense Arena, la piscina de los Juegos Olímpicos de París 2024.
Nueve meses después de aquella cita, con las tres plusmarcas conseguidas por tan solo dos nadadoras demostraron en una piscina al aire libre de Florida, y sin la preparación que se le supone a las grandes citas del calendario, que se pueden batir más récords del mundo individuales en un solo día, concretamente en el espacio de siete horas, que todos los que se vieron en los pasados Juegos: dos fueron entonces, el de Bobby Finke en 1.500 libre y el de Pan Zhanle en 100 libre. Definitivamente, la profundidad de La Défense, de tan solo 2,17 metros, impidió asistir a un espectáculo aún mayor.
La muestra palpable es Ledecky, que a sus 28 años se encuentra en plena forma. Esta semana, en Fort Lauderdale, estableció el segundo mejor tiempo de la historia en 1.500 libre (15:24.51), para ostentar ya los 22 mejores de siempre, y se impuso en el 400 libre (3:56.81) a toda una amenaza como Summer McIntosh (3:58.28). Pero le quedaba la guinda. Y en la jornada final, asombrando a propios y extraños, batió a su propio ‘yo’ de cuando tenía 19 años. De hace 3.186 días, cuando en los Juegos de Rio 2016 se situó en 8:04.79 en el 800 libre. Ahora, lo rebaja a 8:04.12, lo que supone su decimosexto récord del mundo individual.
Marchand: “Katie es la mejor”
“No puedo dejar de sonreír, ha sido una noche increíble”, expresaba a pie de piscina, como no podía ser menos. Incluso Léon Marchand, presente en Fort Lauderdale, reaccionó a lo grande: “Katie es la mejor, hacerlo tan bien y durante tanto tiempo es una locura, algo muy inspirador y asombroso de ver”. Y ambos tenían igualmente palabras para la otra protagonista de la noche, Gretchen Walsh. Decía el francés que ella “también es increíble, de otro nivel”. Y Ledecky confesaba que la plusmarca matinal de su compatriota la había “puesto en marcha para empezar una fiesta de récords mundiales”.

Y así fue. Porque Walsh ya había sido capaz a las 10:23 de la mañana, en unas simples preliminares, de rebajar su propio récord del mundo en 100 mariposa, que dejó en 55.09. De modo que en la final, a las 19:00 horas, directamente siguió la misma táctica para volver a pulverizarlo. Para ser la primera nadadora en bajar de los 55 segundos: 54.60 es su nuevo tope, el de la poseedora de las cinco mejores marcas de siempre, incluyendo el récord olímpico. En su caso, es el decimosexto récord del mundo (individual más colectivo) en los últimos 12 meses. E irá a por más.
El truco de la brazada de menos
Porque Walsh, a su salida del agua, reconoció que su estrategia en la final había sido la misma que por la mañana, cuando había descubierto que dar una brazada menos tras el viraje (17 en los primeros 50 metros, 16 en los últimos) le había insuflado “energía extra”. Y ahí está su margen de mejora: “Me quedé larga en el viraje y también en la pared, lo cual me alegra bastante porque significa que aún puedo ir más rápido, que puedo perfeccionar la carrera”.
Haber ido “todos los días a la playa” durante las Pro Swim Series de Fort Lauderdale, con una posterior siesta de dos horas, ha sido otra de las claves mentales para una Gretchen Walsh que tiene por delante los Trials estadounidenses, en junio, y los Mundiales de Singapur, un mes después. Igual que Ledecky. Las dos nadadoras que desde Florida dieron la estocada a La Défense Arena.
Coll y Vallmitjana, los españoles más destacados
En cuanto a la participación española en las Pro Swim Series de Fort Lauderdale, 15 fueron los nadadores participantes. Y dos los que subieron al podio, entre los tres mejores de su especialidad. Por un lado, Carles Coll venía de ser cuarto en el 100 braza y en la última jornada hizo un segundo puesto en 200 braza, la distancia de la que es campeón del mundo en piscina corta.
Demuestra así que está más que preparado para la piscina olímpica, con un tiempo de 2:11.09, tan solo por detrás de Denis Petrashov (2:10.29), del Kirguistán, a quien habría superado de haber repetido su mejor marca personal, lograda el pasado 5 de abril en las Pro Swim Series de Sacramento: 2:10.25. Un poco lejos queda aún el récord de España, que mantiene Melquiades Álvarez en 2:09.69 desde 2009.
Ese mismo año nacía precisamente el otro español destacadísimo en Fort Lauderdale, un Juan Vallmitjana que en edad júnior fue capaz de quedar tercero en el 1.500 libre, con un tiempo de 15:24.55, tan solo por detrás del plusmarquista mundial Bobby Finke y de Ryan Erisman.
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